La entrada de las tabletas en el mercado informático supuso toda una revolución tanto en lo que respecta al aspecto tecnológico como al comercial. Son un producto que sigue muy de moda debido a todas las ventajas que nos ofrecen en nuestro día a día, y cuyas ventas han superado ya a las de ordenadores personales y portátiles.
Tradicionalmente se ha dicho que un usuario medio de ordenadores llegaba a extraer solo un mínimo porcentaje de su rendimiento. La aparición de las tabletas no ha hecho más que confirmar lo anterior, puesto que para las acciones más cotidianas, como navegar por Internet, actualizar redes sociales o consultar el correo electrónico, los dispositivos móviles son más que suficiente, con el añadido de la comodidad y versatilidad de su uso.
Para tareas más complejas, sin embargo, aunque cada vez se emplea más la tablet a nivel profesional, el público mayoritariamente sigue utilizando un ordenador de sobremesa o un portátil, ya que la gestión de la multitarea y el uso de potentes programas consumen muchos recursos de memoria.
Asimismo, los jugadores de videojuegos más exigentes también prefieren utilizar los ordenadores frente a los dispositivos móviles, ya que su potencia gráfica es mucho mayor y, en caso de necesitar la actualización de los componentes, la modificación es más cómoda y barata.
Es verdad que el desarrollo tecnológico está limando la frontera que delimita ambos productos y nos encontramos con tabletas que se parecen a ordenadores y viceversa, pero las primeras, al resultar mucho más cómodas y manejables, siguen siendo las elegidas para llevarlas en nuestros momentos de ocio y relax al aire libre: tomando el sol en la playa, descansando en la toalla después de un chapuzón en la piscina, etc.
Financiación
Actualmente en el mercado hay opciones para todos los bolsillos. Resulta muy conveniente para el consumidor interesado en adquirir este tipo de artículos estar pendiente de la aparición de versiones más actualizadas ya que, por lo general, esto acarrea una bajada de precios en las anteriores, aunque también supone tener que
disponer de dinero al instante para aprovechar estos chollos.
Esta rapidez con la que aparecen nuevos modelos y la competencia entre las marcas provoca que se puedan encontrar modelos entre los 100 y los 300 euros, por lo que, ante el deseo de adquirir una
tablet para disfrutarla lo antes posible sin tener que esperar a cobrar a final de mes, pedir un
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Y es que, muchas veces, las ofertas en este tipo de productos suelen ser puntuales y duran apenas unos días, por lo que uno de nuestros
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tablet y, ¡a disfrutar del verano conectados en cualquier parte!
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